Son
innegables los beneficios que trae el realizar ejercicios físicos de manera
constante. Al llegar a la tercera edad el continuar con esta práctica permite
mejorar la calidad de nuestro sistema muscular y óseo, adicionalmente mejoramos
nuestra capacidad cardiorrespiratoria. Esta bastante comprobado los beneficios
del ejercicio en el sistema inmunológico incrementando nuestro nivel de salud.
La
realización de ejercicio físico no solo tiene un impacto en el ámbito de la
salud, nos ayuda a mantener una interacción constante con las personas, el
sentirse útil y en contacto evita la generación de depresión o cambios en el
estado de ánimo.
Dentro de las principales actividades
físicas recomendables para la tercera edad se cuentan:
·
Caminar.
·
Montar
en bicicleta al aire libre o estática.
·
Bailar.
·
Natación.
·
Yoga.
·
Taichí.
·
Gimnasia aeróbica de bajo impacto.
·
Gimnasia en el agua.
No hay que olvidar que antes de practicar estos deportes
se deben seguir ciertas recomendaciones:
1. Realizar
un trabajo de precalentamiento que debe concentrarse en realizar movimientos de todas las articulaciones del
cuerpo cuello, hombros, cadera, rodillas y tobillos.
2. La
rutina de ejercicio debe privilegiar el movimiento por sobre la fuerza, por lo
que las actividades se deben realizar de manera pausada y controlada.
3. Es indispensable
ejercitar brazos y piernas aumentan la tonicidad contribuyendo al equilibrio de
manera de prevenir caídas y sus consecuentes lesiones.
4. Una
vez finalizado los ejercicios nuevamente se debe finalizar con ejercicios de
estiramiento.
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